Forma parte de esta comunidad con tu membresía y asiste a las clases en directo.
¡Tenemos varias ponencias sobre campos móficos y física aplicada a la biología que te fascinarán!
Accede a la videoteca para ver los contenidos grabados de la membresía.
Los campos mórficos y la estructura del vacío.
Una explicación de la complejidad biológica.
El legado de Nassim Haramein.
Por: Biol. Eduardo G. Lucia Mánica
Los campos mórficos, donde mórfico proviene del griego morphe que significa “forma”, son los campos que se encargan de organizar a la materia, desde las moléculas, cristales, células, hasta todos los sistemas biológicos (Sheldrake, 2011). Estos campos no sólo están encargados de organizar la forma, sino que también tienen un papel fundamental en la transmisión de información entre todos los sistemas biológicos, una clase de conciencia colectiva que ayudaría a dar las pautas de la organización de los grupos sociales, como puede observarse en la complejidad del vuelo de las parvadas o el nado de cardúmenes (Sheldrake, 2011). Estos campos se distinguen entre sí debido a sus diferentes resonancias mórficas, las distintas frecuencias a las que vibran en el espacio dando como resultado campos interconectados y fractales (uno dentro de otro) que ayudarían a definir la dinámica y las escalas de la materia otorgando la gran complejidad biológica en nuestro planeta.
La morfogénesis biológica puede definirse como el «desarrollo de la forma concreta característica de los organismos vivos». El problema es precisamente el de la aparición de dicha forma. El desarrollo biológico es epigenético y consiste en la aparición de nuevas estructuras que no pueden explicarse en términos de estructuras que ya se hallaran presentes en el huevo. No hay, dicho de otro modo, ojos en miniatura en los huevos del águila, ni flores en miniatura en las semillas de la dedalera (Sheldrake, 2011). Entonces, ¿Cómo podemos explicar la aparición de nuevas estructuras a partir de los campos mórficos o morfogénicos?
Si observáramos esta problemática solo desde el ámbito biológico seguramente tardaríamos décadas en aproximarnos a una explicación con sustento, pero afortunadamente tenemos ciencias hermanas que también se encargan de estudiar las interacciones de nuestra realidad, y en este caso la que nos aportará información fundamental para entender cómo funcionan estos campos será la Física, particularmente dirigida hacia la teoría del físico teórico Nassim Haramein, que propone que en el centro del átomo donde se encuentran los protones, éstos cumplan la condición necesaria para ser hoyos negros, así como también los habría en el centro de los planetas, estrellas, galaxias y el universo (N. Haramein, 2000).
Para entender cómo es que un protón puede ser un hoyo negro, hay que comprender un poco de física básica como el hecho de que los átomos, de los cuales estamos compuestos al igual que toda la materia, son aproximadamente 99.9999999% de espacio y lo que percibimos como realidad material es tan solo el 0.0000001% del Todo, pero ¿qué es la materia?, la Real Academia Española (RAE) tiene varias definiciones destacando dos para los requerimientos de este trabajo, una de ellas es “Realidad espacial y perceptible por los sentidos de la que están hechas las que nos rodean y que, con la energía, constituye el mundo físico” y la segunda “Ser que tiene existencia física, por oposición a espíritu”. Pero estamos en materia de física, así que ¿Cómo se define? Debido a que toda la existencia es en su mayor parte vacío, con una pequeña fluctuación o vibración en este espacio, esas vibraciones a diferentes frecuencias vendría a ser nuestro mundo material y que en la Teoría Cuántica se describe como, “una onda de forma que genera lo que llamamos estructura atómica” (Haramein, 2000).
La materia vendría a ser los límites en el vacío, que genera el Universo a diferentes escalas utilizando frecuencias distintas, pero ¿Cómo genera estas frecuencias? Para darnos una idea de cómo se producen iremos a los hoyos negros, como el ubicado en el centro de nuestro Universo o en el centro de las Galaxias, y los ahora predichos al centro del Sol, los Planetas y el Protón (Haramein, 2000). Al añadir el efecto Coriolis, descrito en 1836 por el científico francés Gaspard Gustave Coriolis, y que se define como ” el efecto que se observa en un sistema de referencia en rotación cuando un cuerpo se encuentra en movimiento respecto de dicho sistema de referencia”, junto a otros elementos físicos a las ecuaciones de campo de Einstein nos lleva a avances significativos en el entendimiento de la dinámica de las: novas, supernovas, formaciones galácticas, hoyos negros, etc. y avances en una teoría de unificación (Haramein, 2004), otorgándonos una visualización de cómo se generan estas frecuencias que crean nuestra realidad.
Las dinámicas de los hoyos negros, y la relación a su estructura ( N. Haramein, The origin of spin, fig. 1a, 1b, 1c, pp. 163. 2004.) se observa como una forma toroidal que se retroalimenta generando esos límites en el vacío materializando esferas, a diferentes escalas como planetas (N. Haramein, 2008) que tienden a autorregularse como lo hacen los Seres Vivos a través de la homeostasis (Lovelock, 1979.), los astros nos proporcionan ejemplos de cómo funcionan las dinámicas toroidales en puntos geográficos exactos donde siguiendo la estructura del vacío (el cubooctaedro, vector en equilibrio) y cómo se genera geométricamente obtendremos elementos resaltantes en los puntos clave de esta geometría. Si tomamos un tetraedro conformados por 20 tetraedros más pequeños y lo unimos a uno igual, pero polarizado, entendiendo que la Naturaleza es polarizada (Masculino-Femenino, Día-Noche, Positivo-Negativo) obtenemos en el centro al cubooctaedro, mientras que las esquinas de los tetraedros principales interceptan las latitudes 19º 47´N y 19º 47´S en las cuales si se observan a los astros hay una posible coincidencia en la dinámica de giro de los tetraedros con las diferentes manifestaciones naturales que se observan en los planetas o el Sol (Fig. 1, Fig. 2), por ejemplo: las manchas solares, el monte Olympo en Marte el más grande del Sistema Solar, el volcán de Hawái en la Tierra y artificialmente, pero de valor reflexivo, las pirámides de Teotihuacán (Peter Tompkins, Mysteries of the Mexican Pyramnids, 1972).

Figura 1.Cuboctaedro-Vector en equilibrio conformado por la unión de 2 tetraedros principales, cada uno a su ves estructurado por 20 tetraedros pequeños. |
Figura 2. Fotografía de la NASA, 1998. donde se observan la dinámica solar (Manchas Solares) coincidiendo en la Latitud 19º 45´ donde se encuentra la intersección con la base de los tetraedros. |
Para concluir, si tomamos a los hoyos negros como los generadores de la materia la cual sigue el patrón de la estructura del vacío, pero con una pequeña fluctuación en el espacio que varía su frecuencia dependiendo la escala en la que se encuentre dentro de esta estructura, y que en el caso del humano, nuestro rango visual nos otorgaría la percepción de la realidad material en la que vivimos; como la conexión con la singularidad, el vacío, donde se encuentran todas las frecuencias, la información de todo el Universo y que los protones son hoyos negros a una escala más pequeña y lo integramos a los campos mórficos que pretenden dar una explicación a la forma y hábitos que adquieren los seres vivos a lo largo de su desarrollo nos encontramos con una relación, en mi opinión, evidente.
De forma sencilla, ya que la interacción entre los campos mórficos es naturalmente compleja, para una adquirir una idea básica se harán dos categorías de campos, los que dan la forma a los organismos y los que intercambian información con su especie en común, geométricamente los visualizaremos como el cubooctaedro como conexión principal con la información y los tetraedros (Líneas rectas, Masculino) como el transporte de la información para hacer la retroalimentación con la singularidad; y a la flor de la vida, los círculos y las esferas (Líneas curvas, Femenino) como la forma principal que compone a los organismos.
Se hace énfasis en la forma por la facilidad de observación y la posibilidad de hacer mediciones materiales, el patrón femenino de curva que esperaríamos encontrar en los seres vivos dentro de nuestro rango visual sin recurrir a instrumentos para accesar a otras escalas de la materia donde encontramos esferas, es la proporción dorada, la espiral de Fibonacci que se encuentra relacionada con la geometría del vacío y que, se podría decir, no está equilibrada ya que no crea círculos o esferas perfectas, sino un patrón derivado de la misma geometría y que se encuentra en una dinámica de aprendizaje-retroalimentación. Como prueba de la existencia de la antes mencionada proporción se anexan imágenes donde se puede observar la relación entre la espiral de Fibonacci con la forma y crecimiento de algunos organismos.
En cuanto a la conexión, entenderla con la dinámica mencionada anteriormente podría hacer que demos pasos hacia el resolver cómo las aves logran moverse al unísono como un solo organismo en lo que llamamos parvadas o los peces en sus dinámicas acuáticas agrupados en cardúmenes y que inexplicablemente realizan nados o vuelos que ni los pilotos más experimentados podrían lograr, o encontrar la razón por la que ciertos animales como los salmones realizan su migración como si lo hubieran recorrido infinidad de veces antes cuando el único momento en que estuvieron en el destino final fue cuando sus padres los concibieron como huevos que posteriormente fueron esparcidos por las corrientes de los ríos hasta las corrientes del mar donde se desarrollan y en el momento adecuado toman el camino correcto hacia su lugar de origen para continuar con el ciclo.
Anexo fotográfico.


Regístrate en la lista de correos y recibe material único.
Si decides formar parte de nuestra lista de exosomas, suscriptores interesados en este proyecto, te llegarán los siguientes regalos.
- Un vídeo explicativo del fraude de la COVID 19, creado por las farmacéuticas, donde jamás intervino ningún virus.
- Una clase sobre los experimentos de Salisbury, en los que se construyó un laboratorio para tratar de demostrar la teoría del contagio y resultó el más estrepitoso fracaso.
Además accederás a la lectura de los artículos de la web, que te llegarán cómodamente a tu email.
No pierdes nada y tienes mucho que ganar, porque darte de alta es gratis y darte de baja, también es
Referencias bibliográficas.
- Nassim Haramein. The Schwarzschild Proton, AIP CP 1303, 15BN 978-07354-0858-6, pp.95-100, December, 2010.
- Rupert Sheldrake, Una Nueva Ciencia de la Vida, una Hipótesis en la causación formativa. Ed. Kairos, Abril, 2011.
- James Lovelock, Las Edades de Gaia, una Biografía de Nuestro Planeta Vivo. 1979.
- Nassim. Haramein, E.A. Rauscher Collective. Coherent Oscillation Plasma Modes in Surrounding Media of Black Holes and Vacuum Structure – Quantum Processes with Considerations of Spacetime Torque and coriolis Forces, The Resonance Project Foundation, Tecnic Research Laboratory, 3500 S. Tomahawk Rd., Bldg. 188, Apache Junction, AZ 85219 USA.
- Nassim Haramein, Quantum Gravity and the Holographic Mass, Physical Review & Research International 3(4): 270-292, 2013. SCIENCEDOMAIN international
- Nassim Haramein, Elizabeth A. Rauscher. Spinors, Twistors, Quaternions, and the “Spacetime” Torus Topology. The Resonance Project Foundation. Computing Anticipatory Systems, D. Dubois (ed.), Institute of Mathematics, Liege University, Belgium, ISSN 1373-5411, 2007.
- Nassim.Haramein, M.Hyson, E.A.Rauscher, Scale Unification – A Universal Scaling Law for Organized Matter. Proceedings of The Unified Theories Conference (2008), Scale Unification: A Universal Scaling Law for Organized Matter, in Cs Varga, I. Dienes & R.L. Amoroso (eds.)
- Nassim. Haramein, E.A. Rauschers The origin of spin: a consideration of torque and coriolis forces in einstein’s field equations and grand unification theory. The Resonance Project Foundation. Tecnic Research Laboratory, 3500 S. Tomahawk Rd., Bldg. 188, Apache Junction, AZ 85219 USA. January , 2004.
Excelente presentacion y magnifico artículo. No conocía a Haramein… y la verdad es que ahora, desde mi desconocimiento de su obra y de la física cuantica, comienzan a cuadrarme muchas cosas. Gracias. Seguimos avanzando, aprendiendo, investigando…